viernes, 28 de febrero de 2014

Cita

-Hola.
-Viniste.
-Te dije que cuando estuviera en la ciudad iba a visitarte.
-Siempre venís y nunca me llamás.
-Sabés que estoy comprometido.
-Si, con Dios y no se que más.
-No te rías.
-No me río. Quiero enamorarte.
-Mi compromiso es con Dios.
-No quiero que dejes ese compromiso.
-¿Entonces?
-Quiero tener sexo una noche entera con vos.
-¿Y así me vas a enamorar?
-Si, vamos a despertar abrazados.
-Dios hace milagros ¿vos hacés milagros?
-Enamorarte sería un milagro.
-¿Estás hablando en serio?
-Haría feliz a dos personas. Eso para mi es un milagro.
-Yo soy feliz.
-Yo todavía no.
-¿Por qué?
-Porque quiero besarte.
-Yo también.
-Besame.
-No puedo, estoy comprometido.
-¿A que viniste entonces?
-A esperar un milagro.
-¿Mío?
-Si, o de Dios.
-¿Y?
-Nada.
-Besame entonces.
-No.
-Yo se hacer otro milagro.
-¿Cuál?
-Puedo desaparecer.
-Eso es magia.
-Es lo mismo, en ambos casos la gente tiene que creer.
-No comparto.
-Que me importa.
-No te enojes.
-No estoy enojada.
-¿En serio sabés desaparecer?
-Claro.
-¿Cómo?
-Así...


No hay comentarios:

Publicar un comentario